CAPITULO 39

YA HE SALIDO DE DUDAS
Luna bajó por las escaleras con unos pantalones rasgados, unas calzas negras, una camiseta negra y se dirigió al sofá.
-Hola chicos. Lo siento pero tengo mucha prisa, Paula, me acaba de llamar tu prima diciéndome que está en la ciudad y que si queríamos quedar en quince minutos en la plaza para ir de compras...
-Vale, Lu, respira.
-Lo siento, es que tengo prisa. Chao boo.bear-le besó en los labios a Louis.-te amo-le volvió a besar. Adiós enrulado, Paula, si después quieres venir péganos un toque y te decimos donde estamos.
-Okey, después te llamo.
Luna salió por la puerta poniéndose su chaqueta de color salmón y Louis y Harry se me quedaron mirando.

No era que mi prima me cayera bien, pero es que de pequeñas siempre me peleaba con ella y...en fin, hay que olvidarse de ello, las cosas malas hay que dejarlas atrás.
-Louis, una cosita...ten cuidado con mi prima, que va a por ti-se rieron, pero iba en serio.
-Lo siento, pero Louis está ocupado en estos momentos.-esta vez me acoplé a la risa.
-Bueno chicos, si queréis quedaros, pero vais a estar un poco solos porque yo me voy a vestir.
-No, ya nos vamos princesita.-Harry me dio un beso como el que le dio Louis a Luna ayer, y me di cuenta de que Irimia tenía razón, lo de Louis solo había sido un mal recuerdo, solo eso, en mi vida amorosa solo existía a partir de ahora Harry, solo él.
Subí a mi habitación mientras que ellos abandonaban mi casa. Luna se había vestido bastante, iba bastante arreglada, así que yo no sería menos. Comencé a revolver todo el armario hasta encontrar la ropa adecuada y la verdad es que me costó bastante.

Me estaba desesperando un poco hasta que encontré un conjunto que hacía más o menos un año que no me ponía, igual no me servía, pero tampoco había cambiado mucho desde el año pasado a este.
No era nada de el otro mundo, pero tampoco era nada del otro mundo la ocasión, así que ahora lo que me preocupaba era ordenar todo aquello, sola en casa sin ninguna ayuda.

No me acababa de convencer el estilo ''calza'' pero no quería ir muy distinta por lo que añadí unas al conjundo del mismo color que las flores del vestido.