CAPITULO 38

CONFUSIONES
Esto no me podía estar pasando, justo tres días después de casarme, era un poco raro. Sé que estoy enamorada de Harry, pero no sé que me pasa con Louis al mismo tiempo. Hay, no se, me estoy liando yo sola. Harry, Louis, Harry, Louis...pero que digo, estoy casada, ¡aishhh! Me estoy empezando a poner nerviosa. Vamos a concentrarnos...Harry es tu marido-dije hablando para mi misma-, el padre de tus hijos, con que has formado una familia y Louis...es un amigo, que siempre está ahí cuando lo necesitas, lo quiero muchísimo, per nada más que eso. Definitivamente, tenía que cortar por lo sano. La cosa era...como hacerlo. Me encontraba encima de mi cama, mirando la maldita grieta que me recordaba a Louis y a mi. Me levanté al reaccionar lo que aquello significaba para mi, para no segur sufriendo por esa estupided. De repente, nada más levantarme de la cama, sonó el timbre y bajé descalza a abrir. Era Harry y Louis.
-Hola princesita ¿como te has levantado hoy?-me saludó Harry.
-Bueno...más o menos.
-¿Estás bien?-preguntó Lou.
-Si, perfectamente. ¿Solo habéis venido para ver como estaba?
-Si...y de paso he venido yo a ver a mi otra princesita.
-Si, ahora la llamo...-dije con desánimo, pero antes de que me moviera Louis me agarró por el brazo inmovilizándome.
-Espera, lo primero es lo primero.
-Y...¿que es lo primero?
-Pues...no se si te acuerdas, pero todavía no te he dado tu ragalo de boda de Luna y mío.
La verdad es que me había asustado porque pensé que había notado lo mío de ayer y yo, como que no quería.
-Oh, es verdad...¿que es?
No me contestó, lo abrí mientras que él sonreía más que nunca.
-Oh madre mía-exclamé.
-¿Te gusta?
-Es genial.-nos habían comprado una televisión enorme de plasma porque sabían que a Harry y a mi nos encantaba ver juntos películas de miedo.-muchas gracias.
Mientras yo sujetaba la televisión noté un sueve cosquilleo en mi tobillo. Era Minilou, que había entrado desde el jardín hasta el salón.
Este perrito me recdordaba mucho a Louis, lo que hacía esto un poco más difícil. Se llamaba como él pero en pequeño, y por enciema era un regalo suyo.
A continuación Louis lo cogió en el colo.

Le quedaba bastante bien lo de....¿pero que digo? Creo que se me está llendo la pinza.
-Mejor ahora voy a buscar a Luna.
-Gracias Paula, eres un sol.
¿Un sol? O que bonito, en serio me hebía dicho eso...en fin, se supone que me tiene que gustar que me lo diga Harry ¿no? Pues eso.
Abría la puerta de la habitación de Luna, Macy y Gema y solo se encontraba allí la primera leyendo un libro.
-¿Y las otras?
-Se fueron a las ocho de la mañana a correr, ya ves que ganas, Irimia fue con ellas.
-Okey, tu querido novio está abajo con mi querido nov...marido.
-¿Que quieren?
-Venían a ver como me encontraba yo porque no pasé una buena noche la noche pasado y de paso Louis quiere verte.
-Ahora bajo...
-Te espero abajo.
-Me visto y ya voy.
-No tardes que te conozco.
-Yaaaa pesada.